Desconocía que en Las Palmas de G.C. con Distrito Teatro, se realizasen talleres de “teatro ciudadano”, pero mi tocayo y amigo Vega, se encargó de sorprenderme…
¡Y vaya si lo hizo!
Distrito Teatro. Actores por un día en el teatro de barrio.
Uno de esos días en los que tratamos de cuadrar agendas para ir a observar aves en libertad, me dijo que se había apuntado a un taller de teatro y claro, eso ocupaba un par de días a la semana para los ensayos. Se complicaba la cosa, pero algún hueco se encontraría.
He de decir que lo dijo con una expresiva cara de…
“en menudo fregado me he metido” o “no se yo cómo va a salir esto”,
… que inmediatamente se transformó en un…
“¡Dios! ¡Estoy disfrutando como un cosaco! “
¡Recuerda! Clica en la fotografía para verla a mayor tamaño y en [ ] para pantalla completa.
Fue tan expresivo y estaba tan animado, que me puse a curiosear sobre esa iniciativa.
Resulta que “Distrito Teatro”, forma parte de una iniciativa de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Las Palmas de G.C., que denominó “Distrito Cultura”.
Se trata de la realización de unos talleres gratuitos de interpretación teatral en distintos distritos de la ciudad, (en 2023 fueron Tamaraceite, Mata e Isleta) pero no sólo como una experiencia lúdica, sino como una posible experiencia de desarrollo personal. No en vano se trabajan aspectos como la concentración, la memoria, la desinhibición, la respiración o la expresión corporal. Todos ellos elementos importantísimos en el desarrollo de las habilidades interpretativas.
La preparación corre a cargo del grupo teatral “Profetas de Mueble Bar”. Un grupo que comenzó su andadura allá por 1980, que fue el primero registrado como tal en Canarias y que, como ellos mismos dicen…
“… hemos hilado con la materia de la que están hechos los sueños, indagando en los límites y espacios de la crueldad, del absurdo, de la farsa surreal, en la risa grotesca y del payaso blanco, en la puya ácida y en la sutil, …”
Un talante, que como me comentó Vega,
“… detrás teníamos unos profesionales increíbles. No cabe duda de que Profetas del Mueble Bar ……… son gente con muchas tablas y eso se nota muchísimo en la preparación y en la formación.”
¡Indudablemente, disfrutó de lo lindo! 
Por mi parte, no podía dejar de asistir a la representación en la que mi amigo había puesto tanto tiempo e ilusión. Era su primera vez y las emociones estarían a flor de piel.
Unas emociones que se dispararon cuando se anunció el inicio, en este caso sin telón, se encendieron las luces sobre el escenario, y tras un breve silencio, …
… irrumpieron algunos de los actores a través del público, arrastrándolo, haciéndolo partícipe de la trepidante acción con que se iniciaba la obra.
¡Empezamos fuerte con fragmentos representativos de lo que fue el “Mayo del 68”!
La protesta estudiantil…
…la sinergia aprovechada por los sindicatos para sumarse a la lucha obrera,
… la polarización social y enfrentamiento entre izquierdas y derechas,
… los convulsos momentos de la historia debatiéndose entre la reivindicación de unos y los intentos de silenciamiento por parte de otros,
…y como no, el posicionamiento oficial representado por un sarcástico personaje muy ilustrativo.
Una entrada tremendamente dinámica en la que los noveles actores recrearon un hecho histórico con gran pasión. La conexión entre los intérpretes y el público fue palpable e indiscutible. Como me comentó Javier…
“… lo que más te queda, es la reacción del público. Si se levantan y te aplauden, ya sabes que has gustado y que todo el trabajo de aquí para atrás ha sido una buena obra y por supuesto, que detrás teníamos unos profesionales increíbles. “
¡Claro que sí! Pensando que para unos es la primera vez, para otros la segunda o tercera, y poniéndome por un segundo en su piel imaginándome la intensidad con que han debido vivir la experiencia, me viene un pensamiento a la cabeza:
Actuar en el cine o hacerlo en un teatro, no es lo mismo. Igual que no es lo mismo hablar por aplicaciones de mensajería instantánea que hacerlo cara a cara.
¡Qué valor tienen!
¿Por qué digo esto? Porque mientras miraba a través del objetivo de mi cámara el desarrollo de la acción, sus expresiones y la convicción con que interpretaban, sentí con igual intensidad que el reto no era capturar algunas imágenes para el recuerdo de mi tocayo, o de mi propia vivencia. Mi verdadero reto, era ser capaz de capturar la esencia de cada momento: la expresión de un actor o la intensidad de una escena.
Era que mis fotografías capturasen esos instantes fugaces que, de otro modo, se perderían en el tiempo.
Fue un emocionante desafío que no se si he conseguido superar, pero que sí se con certeza… he disfrutado.
Pero sigamos con la obra. Tras este baño de teatro de critica social entre realista y vanguardista, introdujeron una antigua y satírica comedia griega escrita por Aristófanes en el siglo V a.C.
Una obra que satiriza a hombres…
… y mujeres,
…a través de cómicas y absurdas situaciones …
… y diálogos humorísticos,
… creando un ambiente cómico y caótico. Eso sí, altamente reivindicativo, utilizando la sátira para criticar la corrupción política y social de la época, y cuestionando tanto los roles tradicionales de género como la exclusión de las mujeres de la política.
Un tema que aunque data de más de dos mil años, se mantiene de rabiosa actualidad porque del todo, lo que es del todo…
… no está superado.
Para desarrollar la obra, el amigo Aristófanes hizo que su protagonista, Praxágora, convenciera a las mujeres de Atenas para que se disfrazasen de hombres, asistieran a la asamblea, tomasen el control, y establecieran un sistema igualitario.
¡Menudos momentos nos dieron!
Una brillante comedia, con una magnifica interpretación, que invita a reflexionar sobre la estructura del poder y las desigualdades sociales que visto lo visto, no parecen tener que ver con las ideologías políticas (que las de hoy no existían en aquel entonces) sino con algo más profundo e íntimamente relacionado con el ser humano.
Tras este entretenido rato de teatro clásico griego, nos transportaron nuevamente al 68 con la representación de “10 de Mayo de 1968”. Una obra del francés Luck de Goustine.
Crítica social pura y dura que puso el acento en puntos especialmente sensibles. Reivindicativa y potente, nos acercaban con absoluta intensidad y convicción a algunas de las protestas que se protagonizaron aquel convulso año.
Como colofón algo más tranquilo y reflexivo. Una increíble muestra del teatro épico de Bertolt Brecht con…
Una obra escrita en 1930, en la que pudimos “vivir” en primera persona el nuevo estilo teatral propuesto por Brecht. Un teatro que más que buscar las emociones empáticas de los espectadores, pretende provocar la reflexión crítica y distante de este, evitando que se involucre emocionalmente en la narrativa de la obra.
En esta versión, aparece el característico narrador que Bertolt incluía en algunas de sus obras para enfatizar aspectos y momentos relevantes de ésta, rompiendo de esa manera la secuencia lineal de la historia,
… metiendo “distancia” entre personajes y público.
También tuvimos un toque “brechtiano” en la escenografía,
… y por supuesto, su objetivo.
Despertar la conciencia crítica del espectador para que, con cierta distancia, reflexione sobre la historia que se le está contando.
En este caso tenemos…
…a Colifeo como el “Consentidor”
… y Antonius; el “Disentidor”
Por lo que he ido curioseando, en otras representaciones se trata de dos personajes que se enfrentan con distintas perspectivas y posiciones, pero en este caso, se ha planteado muy eficazmente para mi gusto, como un único personaje con dos posibles actitudes.
Una historia con un comienzo común…
… que puede terminar de la mano de Colifeo siguiendo las tradiciones, conformista, haciendo lo de siempre…
… o de la mano de Antonius; el inconformista luchador que se enfrenta a “lo establecido” y la injusticia.
El teatro siempre ha tenido un fin y trasfondo que ha dependido del autor, de su época y por supuesto, del contexto.
Sea a través de la sátira, la crítica social o la reflexión – no necesariamente reivindicativa-, se han orientado hacia temas políticos, sociales, lúdicos o universales como el amor, la muerte o la identidad.
Sin embargo, también hay ocasiones en las que se ha utilizado como herramienta para la manipulación social o propaganda política, debido a su gran poder para transmitir ideas y mensajes importantes al público cómo valores religiosos en la edad media, temas universales durante el renacimiento, lo absurdo y lo surrealista durante el s. XX, e incluso la política.
Este es el caso de Brecht que, influenciado por las ideas y principios del marxismo, focalizó su obra en la crítica hacia el capitalismo con el fin de promover la transformación social.
Un sorprendente estilo teatral que logra distanciarte y hacerte reflexionar, que me impactó muy positivamente como modelo teatral.
Indudablemente, poniendo nuevamente en valor que para muchos era su primera experiencia teatral, y con independencia de las valoraciones de las obras teatrales,debo decir que…
… he presenciado unas actuaciones con una calidad e intensidad interpretativa, que no esperaba.
Me han hecho disfrutar como hacía tiempo que no disfrutaba. 
¡Mi enhorabuena y reconocimiento a todos ellos!
Hasta aquí mis vibraciones, pero ¿cómo se le quedó el cuerpo a mi amigo Javier?
Pasados unos días de la representación, y en un momento de descanso durante una salida a pajarear, me comentaba que la experiencia fue muy personal, y que si bien al principio había sido algo difusa y sufrían el “efecto loro”, poco a poco se consolidaba el grupo, iban aprendiendo a “expresar” y entrenando la relajación, la respiración y la visión periférica más allá del propio rol.
Al final, todas las partes -o aspectos- trabajadas pasaron a ser “un todo” con el que te involucras o abandonas. A partir de ahí, comenta que…
… se despiertan unos sentimientos y unas emociones que hacen de la experiencia, algo fascinante.
Tirándole de la lengua un poquito más, me describió como la individualidad de los personajes a interpretar, en la que cada actor se mete en cuerpo y alma -más cuando de alguna manera se sienten identificados- y la colectividad de la escena y de la obra, se hacen nuevamente “un todo” de coordinación, concentración y complicidad, permitiendo que pequeños errores o imprevistos sean resueltos sin afectar al desarrollo de la obra, y lo más importante, sin que llegue al público.
Una sensación impresionante que no sólo te hace “sentir actor” al menos por un día, sino que te ha enseñado a relajarte, a saber estar, a controlar ciertas situaciones y sobre todo, como dice con emoción…
“… te hace consciente de que cosas que pensabas que no podrías hacer, has sido capaz de hacerlas. Por supuesto que con trabajo y tesón.”
Una experiencia que ha podido llevar a su día a día y que le ha dejado… con ánimo para seguir con la afición.
¡Menos mal que sólo era un taller de barrio! 
Personalmente creo no es lo mismo intuir la interpretación que uno hace o cree que está haciendo, que ver la interpretación desde fuera, como cuando puedes ver unas fotografías que congelan ciertos instantes, y claro, cuando le pregunté…
“Para nada”
Comentaba que cuando terminas, te sientes con cierta satisfacción del trabajo bien hecho, de haber superado problemas incluso modificando el guion, pero desde dentro. Al tener una visión desde fuera, ves otro tipo de cosas; incluso te ha podido salir mejor de lo que tu pensabas.
Un pensamiento que también compartimos, al igual que la afición a la fotografía.
Respecto a las fotografías que hice, tan sólo son un testimonio visual de la magia y el esfuerzo que este equipo, de la mano de “Profetas de Mueble Bar”, ha desplegado sobre el escenario del edificio Miller.
Unas fotografías que he disfrutado y que no sólo me permiten revivir esos momentos, sino que también me brindan la oportunidad de compartirlas así que, a continuación, en contra de lo que suelo hacer en mis publicaciones, añado una pequeña galería con más “instantes fugaces”.
Espero que les gusten, verles alguna otra vez por mi rincón y por supuesto, si quieren comentar, al pie tienen los enlaces ¿vale?
¡Hasta la próxima! 
